El concepto de convivencia escolar se define como la “coexistencia pacifica de los miembros de la comunidad educativa, que supone una interrelación positiva entre ellos y permite el adecuado cumplimiento de los objetivos educativos en un clima que propicia el desarrollo integral de los estudiantes”.

De acuerdo al concepto entregado, la convivencia escolar se trata de la construcción de un modo de relación entre las personas de una comunidad, que se respeten mutuamente y que sean solidarios entre sí de forma armoniosa y sin violencia entre todos los componentes de la comunidad educativa. Esta convivencia tiene incidencia en el desarrollo ético, socio afectivo, psicológico e intelectual de los alumnos y alumnas; no solo en relación a las personas sino también entre los estamentos que conforman la comunidad educativa, siendo así responsabilidad de todos los miembros y actores de la comunidad educativa.

El Instituto Edumaster de Rancagua constituye un espacio que favorece la convivencia interpersonal, social y organizacional que servirá para dar sentido a los estilos de relación de futuros ciudadanos del país.

El manual del establecimiento cumple un papel orientador y articulador entre todos los agentes educativos, que favorezca la prevención de toda clase de violencia o agresión. Esta convivencia fomenta el crecimiento de los alumnos, logrando esto a través de la reflexión y el cambio de actitud. Este cambio se logra gracias a seguimientos que se realizan a diferentes casos donde se identifican faltas disciplinarias, problemáticas individuales, grupales o familiares que pueden desencadenar en posibles conflictos. Este seguimiento se hace como una metodología para lograr buenos resultado, haciendo participe a la familia como un rol fundamental, ya que comparte los objetivos y valores propuestos por el colegio y que se inculcan también en el hogar.

El compromiso del colegio es que todos los integrantes de la comunidad educativa recibirán un trato digno y de respeto con el fin de lograr un sentido de pertenencia e identidad con el establecimiento, puesto que toda la institución se encentra sustentada en los valores y principios cristianos universales, fundamentados por Dios y su palabra.
Así como Dios no hace acepción de personas, nuestra institución no responde a interese de mercado o tendencias ideológicas subjetivas, sino que a principios que respetan a la persona tal cual es, por lo tanto, no centramos nuestro quehacer en el alumno sino en la persona de forma alejada del estudiante, ya que ese es un rol que se adquiere en la institución.

El proceso educativo que asumen todos los agentes del establecimiento es de vital importancia, puesto que debe existir una interrelación que unifique los criterios y construya un proyecto en conjunto que permita enseñar y vivir en armonía en aula y el patio, y que además se cumplan las normativas y reglamentos establecidos de acuerdo a los valores que se presentan en el PEI.

El reglamento de convivencia escolar es el que rige a un establecimiento y que debe ser conocido por los agentes participantes de la institución. Este reglamento incorpora políticas de prevención, medidas pedagógicas, protocolos de actuación que facilitan el actuar frente a faltas cometidas a la buena convivencia, graduándolas de acuerdo a su gravedad. De igual forma establecerá medidas disciplinarias correspondientes a través de conductas, que pueden incluir desde una medida pedagógica hasta la cancelación de la matricula, siempre rigiéndose por las medidas establecidas por el colegio.

Se entiende como falta a todo acto u omisión que transgreda las normas y reglamentos. Ante esto se plantea un procedimiento disciplinario, mediante el cual se establece la responsabilidad, culpabilidad o inocencia de la persona a quien se acusa, aplicando una sanción según corresponda.

Estas faltas cometidas se clasificarán de acuerdo a la normativa vigente en el establecimiento como: leves, graves, gravísimas e inaceptables; teniendo en cuenta que la persistencia de esta conducta negativa pasará a ser considerada en el nivel superior.


Equipo de Convivencia Escolar